
Extraterrestres en nuestro planeta, investigaciones y evidencias
La existencia de vida en otros planetas ha sido un tema lleno de controversia y misterio, que se mantiene en vigencia a nivel mundial. Desde la primera historia o relato de avistamiento de OVNI o de seres extraterrestres, la existencia de los mismos se ha convertido en un tema de permanente debate.
Las opiniones de creyentes y de retractores, las constantes investigaciones, los avistamientos de OVNI, las abducciones, así como la existencia de cuerpos de seres de otro planeta, son algunos de los factores que alimentan cada día la teoría de que no estamos solos en el universo.
Por otro lado, también se maneja la hipótesis de que algunos gobiernos poseen conocimiento y evidencias irrefutables, de la existencia de vida fuera del planeta tierra. Mucho se ha discutido acerca de que el gobierno de Estados Unidos resguarda material que constituye pruebas de la existencia de vida alienígena, y que incluso poseen cuerpos de seres extraterrestres. Esta hipótesis ha ganado fuerza con el paso del tiempo debido a los datos obtenidos por medio de diversas investigaciones.
Son muchas las investigaciones realizadas, tanto por aficionados como por expertos en el tema de extraterrestres. Muchas de estas averiguaciones han proporcionado resultados que afirman la existencia de vida en otros planetas, basándose en testimonios verificados por medio de herramientas médicas, de la psiquiatría, medios científicos y con el soporte de evidencias físicas.
Presentaremos algunos de los casos más publicitados que hasta la actualidad no han podido ser contradichos, gracias a las evidencias presentadas en cada uno de ellos.
El cráneo del niño de las estrellas
Hace más de 60 años una adolescente estadounidense encontró en una cueva cerca de la región de las barrancas del cobre al sur de Chihuahua – México, dos cráneos enterrados en una mina. La joven regresó a su casa en El Paso – Texas llevando su hallazgo con ella, donde lo resguardo durante toda su vida. Después de su muerte, los cráneos fueron entregados a la pareja estadounidense conformada por Ray y Melanie Young.
Melanie al ser enfermera de cuidados neonatales señaló que uno de los cráneos era de un infante y presentaba malformaciones no humanas, por lo que cedieron los cráneos para una evaluación especializada.
Los investigadores de origen estadounidense Lloyd Pye y Mark Bean, se encargaron de la evolución de los cráneos en conjunto con las empresas especialistas en genética Trace Genetics CA USA y el Instituto Royal Holloway de Londres. También contaron con el apoyo del genetista Dr. Kem Paid y varios especialistas en química, Neurociencia y Cráneo fisiología.
Cráneos encontrados en Chihuahua – México
Los cráneos fueron evaluados científicamente por medio de la prueba de carbono 14, y se determinó que los mismos tienen una antigüedad de 900 años. Además de su antigüedad, uno de los cráneos presenta varias particularidades que requirieron estudios más detallados.
Uno de ellos pertenecía a una mujer de origen humano y presentaba forma normal; el otro pertenecía a un infante de 5 años de edad y presentaba alteraciones no humanas. Este último es el denominado, por las personas locales, cráneo del niño de las estrellas.
Los especialistas realizaron análisis de ADN al cráneo del infante y dedujeron que debía pertenecer a un híbrido. Es decir, el infante debía ser el hijo de una madre humana y un padre de raza no conocida. Además, se contó con la experticia de un cirujano cráneo facial quién, utilizando rayos equis, determinó que la apariencia del pequeño cráneo no se debía a alguna deformidad conocida, y que su morfología no se correspondía con la de un ser humano. La densidad del hueso del cráneo del infante es de la mitad de uno humano pero es mucho más fuerte. También posee residuos de color rojo y fibras microscópicas que no se encuentran ni en humanos ni en animales.
Simulación de la apariencia del infante
Otra de las singulares características del pequeño cráneo, es que las cavidades de los ojos son considerablemente estrechas y también se evidenció que el nño no poseía movilidad en sus ojos.
A pesar de toda la evidencia recopilada, los resultados de los diversos estudios y los análisis realizados a los cráneos, estos continúan representando un misterio y siguen bajo estudio en la ciudad del Paso en Texas.
El extraterrestre de Metepec
Este caso tuvo su origen en mayo del 2007, en un rancho ubicado en México propiedad del señor Mario Moreno López.
El denominado extraterrestre de Metepec quedó atrapado en una trampa para ratas. La criatura poseía una apariencia momificada, se mantenía de pie sobre sus dos patas traseras y era bastante agresivo. Contaba también con una larga cola, con cinco dedos en sus patas, y dentadura con colmillos por lo que se dedujo que era carnívoro.
Después de ser atrapada, la criatura permaneció viva varios días. Muchos escépticos alegaban que esta criatura era un mono, pero luego de varias pruebas de ADN esta teoría se descartó. también la morfología o constitución física de la criatura de Metepec es muy extraña, lo que llevó a concluir que se trataba de un ser de otro planeta.
La ecuación de Drake
Es una fórmula que trata de calcular el número de civilizaciones inteligentes detectables que surgen cada año en nuestra galaxia. Su expresión N = R*·fp·ne·fl·fi·fc·L, donde N es el número de posibles civilizaciones inteligentes detectables, el resto de los parámetros son variables.
Con los cálculos de Drake, se estima que se crean 10 posibles civilizaciones extraterrestres detectables en nuestra galaxia cada año. Sin embargo, los parámetros utilizados por Drake son demasiado optimistas, según estudios posteriores.
A pesar de todo, incluso con las estimaciones más restrictivas, Michael Shermer llegó a la conclusión de que en todo el Universo conocido deberían existir unas 5000 civilizaciones inteligentes. Matemáticamente hablando, parece que no estamos solos.
El extraterrestre de Roswell
El caso de Roswell es uno de los más famosos en el área de los fenómenos extraterrestres. El 10 de julio de 1947 una nave alienígena supuestamente se estrelló en Roswell – Nuevo México.
Después de más de 60 años del accidente, uno de los investigadores del caso presentó nueva evidencia que demuestra que el accidente sí ocurrió, y que la nave estaba tripulada. El periodista e investigador mexicano Jaime Maussan mostró al mundo una fotografía tomada entre 1947 y 1949, donde aparecía el cuerpo sin vida de un ser de otro planeta. La instantánea fue hallada en la casa de la señora Hilda Blair en el estado de Arizona – Estados Unidos. La señora Blair, quién murió en los 90, era piloto de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos.
Para demostrar la evidencia mostrada, se contó con Rod Slemmons, antiguo director del museo Contemporáneo de Fotografía del Columbia Collage, quién certificó que la fotografía era real y no contenía alteración alguna. También se pidio la colaboración del doctor Jesús Zalce Benítez, maestro de medicina forense de la Escuela Médico Naval de México, quién señaló que las deformaciones que muestra el cuerpo de la fotografía no son compatibles con alguna malformación conocida por los humanos. Después de analizar de forma detallada el cuerpo, se detectaron ocho malformaciones:
- Miembros de longitud reducida
- Frente abombada
- Depresión nasal
- Estatura entre 1.20 a 1.30 metros
- Cabeza con tamaño mayor al estándar
Como conclusión de su análisis Zalce indica lo siguiente: “por su morfología y anatomía, observada y analizada, (el cuerpo) conjunta una serie de anomalías que en sumatoria no son compatibles con la vida humana, ya que la adhesión individual de cada patología y cada síndrome posible determinaría una disminución porcentual de la probabilidad de coexistencia a la vida de tipo humana conocida”.
Jaime Maussan
Como soporte adicional de la imagen fotográfica, se contó con las palabras de Eleazar Benavides, único piloto del Campo Aéreo de Roswell que en el momento de la presentación de Maussan seguía con vida. Benavides declaró que el cuerpo que muestra la fotografía es muy parecido a los cuerpos que trasladó en camilla al hospital de Roswell, hace más de 60 años.
Son muchos los casos que como estos han sido divulgados, estudiados, analizados y soportados con evidencias que aseguran que la raza humana no es la única que existe en el universo. Sin embargo, en el área de los misterios la existencia de vida en otros planetas sigue siendo uno de los principales temas de estudio.
Cristina
