
Cierre de ciclos. Ritual que te ayudará a cerrar la puerta sin temor o rencor
Todos hemos pasado por alguna etapa que culminó de forma abrupta, puede ser una relación amorosa, una amistad o un trabajo y nos dejó una sensación de vacío como si no hubiera terminado de la forma correcta, pero quieras o no se acabó y tratar de perpetuar algo que llegó a su final solo nos puede ocasionar más dolor. Esta situación acontece mucho en las relaciones amorosas, la relación se empieza a dañar, lo notas, pero sigues allí poniendo todo de ti. Llega el temido día y la persona que tanto amas se despide y tú no lo deseas aceptar, lo llamas, lo buscas y hasta caes en lo más bajo; la manipulación y la baja estima personal.
No es fácil, cerrar la puerta es una cuestión sumamente dolorosa sin embargo solo así se abrirá otra puerta con cosas nuevas y mejores.
¿Porqué cerrar es la mejor forma de empezar? Al cerrar ciclos que ya cumplieron con su función en mi vida, de los que ya saqué el mejor provecho posible, tengo la oportunidad de tomar la energía que deposito en ellos, y enfocarla en nuevos retos, nuevas experiencias de vida. Dejar ciclos abiertos, en especial si lo hago para no sentir la pérdida, implica un riesgo enorme de que la energía que deposito en éstos, se embote, o pero aún, se disipe y entonces sí, estaría perdiendo lo ganado.
SIC Servicios Integrales de Coaching Gestalt
Hubo un maestro Baduín que invitó a su discípulo a tomar una taza de té, empezó vertiendo en su taza y luego comenzó a verter el té en la taza del alumno, esta se llenó y no demoró en derramarse al plato y del plato a la alfombra. El alumno asombrado grito:" ¡Maestro, maestro, deja de echar el té en mi taza!", Baduín parecía no escucharlo, lo miró a los ojos y le respondió: “Hasta que no seas capaz de vaciar tu taza, ni yo ni nadie podremos poner más conocimiento en ella”. “Hay que vaciarse para poder llenarse, una taza solo sirve cuando está vacía, no sirve una taza llena, no hay nada que se pueda agregar en ella”. Agregó , “Tendrás que vaciar tus tazas llenas, si quieres llenarlas otra vez”.
Jorge Bucay (Buenos Aires, 30 de octubre de 1949) es un psicodramaturgo, terapeuta gestáltico y escritor argentino
Ritual de despedida para hacer en casa
Es muy importante tomar la decisión de cerrar un ciclo, debes tener la convicción de apartar todo aquello que ya no tiene sentido de tu vida y alejarlo con amor, sin rencor y sin odio. Necesitarás para este ritual:
- Sal marina.
- Una manzana.
- Clavos de olor.
- Limón.
- Vela blanca y morada, no importa si el ciclo que deseas cerrar está relacionado con el corazón o el trabajo; la vela blanca purifica y la morada transforma.
- Pluma y tinta.
- Un recipiente para recoger desechos para enterrarlos al final del ritual.
Si estás listo para vaciar la maleta, viajar más ligero por el camino de la felicidad y desechar todo aquello que tuvo cabida en tu vida pero que ya no tiene sentido: relájate, respira profundo y busca una habitación donde te sientas cómodo. Harás un circulo de sal marina lo suficientemente grande para que te puedas sentar dentro de él. Entonces cierra los ojos y recita el siguiente texto:
“Dejo ir en el amor a (aquellos que se va: sea trabajo o pareja)
Lo recubro en luz blanca purificadora
En la llama violeta transmutadora
ya en mi vida tuvo su propósito
esto ha de pasar
cierro este ciclo
sin rencor ni temor
con esperanzas, pues todo será mejor
así es, así sera”
Quédate allí tanto tiempo como desees. Puedes llorar ya que permite que tus sentimientos afloren y descargues tensiones. Luego toma la pluma y escribe en el papel todas aquellas palabras que no fueron dichas en su momento y aquello que deseas decir sobre esa relación, ese trabajo o ese ciclo que se ha terminado. Escribe hasta que ya no tengas nada más que decir. No leas lo que acabas de escribir. Enrolla el papel y enciende la vela blanca y la morada. Pasa el papel primero por la vela blanca: purificará y sanará, y luego por la vela morada: transformará el temor en fe. Deja que el papel se queme completamente en el recipiente.
Seguidamente corta el limón en cuatro partes de forma transversal y longitudinal. Corta la manzana por la mitad en sentido transversal, observaremos así la simbólica estrella de su corazón. Insértale los clavos de olor a las dos mitades. La parte de la manzana que tiene el tallo la sitúas en la entrada de tu casa y la parte de abajo sitúala en la parte trasera. Deposita los limones debajo de tu cama. Descansa ese día.
Pasadas 24 horas del ritual tira los limones en el recipiente de desechos y deposítalo en el exterior frente a tu casa. Toma la parte inferior de la manzana y camina con ella lentamente hasta la entrada de tu casa. La manzana está recogiendo lo que ya no tiene cabida en tu hogar. Cuando llegues a la entrada toma la mitad superior de la manzana, júntala con la parte inferior y deposítala en el recipiente de desechos. Dirígete lejos de tu hogar y entierra el contenido del recipiente con los restos del papel con tus pensamientos, la manzana y el limón. Mientras tanto recita la siguiente frase:
“Gracias por haber formado parte de mi vida, te libero y soy feliz haciéndolo”
Una vez enterrado pisa encima y vete sin mirar atrás. Ya se fue. Déjalo ir, libérate y sé más feliz…
En esta vida todo pasa. Los malos y buenos momentos…
Recuerda que todo esto también pasará,
Déjalo ir…
CrisR.
