
Astrología Celta: ¿Cuál es tu árbol?


Mucho se ha dicho sobre la astrología desde tiempos inmemoriales, y tanto se ha creído en ella que se ha convertido en una tradición para la mayoría de los países del mundo, pues a todos nos gustaría saber cuál será nuestra suerte en un futuro a corto, mediano o largo plazo.
Siempre se ha pensado que los astros conspiran con la naturaleza y que continuamente tienen algo que decirnos a través de su posición y/o movimiento respecto a nuestro destino y nuestro propósito en el mundo.
Al parecer todas las civilizaciones han acudido a los astros tratando de averiguar su porvenir, pero en sus inicios, la astrología atravesó innumerables conflictos, sobre todo religiosos que cuestionaron sus objetivos y tildaron de herejes a sus adeptos. Sin embargo, en la actualidad, un gran porcentaje de la población mundial acude o ha acudido alguna vez a los favores astrológicos para saber cuál será su fortuna, pues si hay un lugar donde quiere vivir el hombre es en su futuro, por ende, siempre se siente tentado a saber cómo puede ser dicho lugar.
Los Celtas fueron un conjunto de pueblos de la Edad de Hierro que cultivaron una cosmovisión muy arraigada a la naturaleza, por lo que sus ideas sobre la predestinación y el porvenir se basaron en los bosques; fundamentaron el tiempo en las fases de la luna y sus centros rituales en los árboles que representaban a las divinidades.
Es cierto que existe una conexión entre los astros y nuestra realidad, y los celtas han partido de ese punto para forjar su sistema de adivinación. Esta civilización estuvo muy al tanto de los conceptos adivinatorios y ha puesto en nuestras manos su legado: un universo de veintiún árboles que conjugados con las fases lunares nos enunciarán el porvenir. Para ello, a cada estado de la luna y a cada uno de los árboles se le otorgó un nombre y una propiedad, y en base a ambos elementos se diseñó un horóscopo protector distribuido del siguiente modo:
- Dos árboles para los equinoccios -esos momentos del año en que la duración del día es igual al de la noche en todo el planeta-: el Olivo para el equinoccio de otoño que ocurre el 23 de septiembre, y el Roble para el equinoccio de primavera que empieza el 21 de marzo;
- Dos árboles para los solsticios -esos períodos en que la duración del día o de la noche son las máximas del año, el día será más largo que la noche en el solsticio de verano, y la noche será más larga que el día en el solsticio de invierno-: el Abedul para el solsticio de verano que sucede el 24 de junio, y el Haya solsticio de invierno que sucede el 2 de diciembre.
Los bosques representaban las catedrales para los sacerdotes celtas, en ellos se llevaban a cabo sus fiestas, rituales y ceremonias, y cada árbol, por ser consagrado a un Dios, simbolizaba una virtud. Por ello, los árboles y bosques fueron símbolos de vida y protección en la Astrología de esta civilización, a cuyo alrededor fueron asentadas las bases de su cultura. Aquellos nacidos bajo la influencia de un árbol reciben sus características y protección. Los diecisiete arboles restantes del Universo Celta fueron organizados en períodos paralelos y opuestos:
- Árbol de Manzana (diciembre 23- enero 01). Aventurero, presumido.
- Árbol de Abeto (enero 02- 11). Modesto, sofisticado.
- Árbol del Olmo (enero 12- 24). Fuerte, apasionado.
- El Ciprés (enero 25- febrero 03). Valiente, optimista.
- Álamo (febrero 04- 08). Solitario, entusiasta.
- El Cedro (febrero 09- 18). Optimista, impaciente.
- El Pino (febrero 19- 28). Natural, talentoso.
- El Sauce (marzo 01- 10). Honesto y soñador.
- Árbol de Limas (marzo 11-20). Sacrificado, dócil.
- El Roble (marzo 21). Sensible, independiente.
- Árbol de Avellanas (marzo 22-31). Temperamental, justo.
- Árbol Rowan (abril 01- 10). Encantador, incansable.
- Árbol de Arce (abril 11-20). Reservado, orgulloso.
- El Nogal (abril 21-30). Ambicioso, creativo.
- Álamo (mayo 01-14). Solitario, noble.
- Árbol de Castañas (mayo 15-24). Diplomático, fiel.
- Árbol de Cenizas (mayo 25- junio 03). Impulsivo, prudente.
- Árbol Hornbeam (junio 04-13). Disciplinado, razonable
- La Higuera (junio 14-23). Volátil y extrovertido.
- Árbol de Abedul (junio 24). Atractivo y elegante.
- Árbol de Manzana (junio 25- julio 04). Aventurero y enamorado.
- Árbol de Abeto (julio 05- julio 14). Laborioso y luchador.
- Árbol del Olmo (julio 15-25). Alegre y honesto.
- El Ciprés (julio 26- agosto 04). Fiel y desinteresado.
- Álamo (agosto 05-13). Serio y selectivo.
- El Cedro (agosto 14-23). Le gusta impresionar.
- El Pino (agosto 24- septiembre 02). Agradable y enamoradizo.
- El Sauce Llorón (septiembre 03- 12). Melancólico, exigente.
- Árbol de Limas (septiembre 13- 22). De grandes talentos.
- El Olivo (septiembre 23). Tolerante y calmado.
- Árbol de Avellanas (septiembre 24- octubre 03). Apasionado, justo.
- Árbol de Rowan (octubre 04- 13). Independiente e incansable.
- Árbol de Arce (octubre 14- 23). Alegre, original.
- El Nogal (octubre 24- noviembre 11). Lleno de contrastes.
- Árbol de Castañas (noviembre 12- 21). Ama una sola vez.
- Árbol de Cenizas (noviembre 22- diciembre 01). Impulsivo y vivaz.
- Árbol Hornbeam (diciembre 02- 11). Seguro, arriesgado.
- La Higuera (diciembre 12- 21). Dureza y sensibilidad.
- Árbol del Haya (diciembre 22). Buen líder.
¡Aprende a conocerte! Este horóscopo te revelará los datos escondidos de tu personalidad para qué sepas cómo llevar las riendas de tu vida y de cuáles personas deberás rodearte para conseguir el éxito en el amor y en los negocios. Descubre el rumbo que has de seguir con la Astrología Celta, cuáles son los vaticinios de los astros respecto a tu porvenir y qué tan próspero será tu futuro.
